El hospital como organismo ético
Resumen
No parece que haya una respuesta única y general a la pregunta acerca de si el hospital puede actuar como agente moral. Muchos hospitales se manifiestan como entidades dotadas de conciencia ética, mientras que otros prefieren permanecer un limbo de indiferentismo ético institucional. El pluralismo ético, el derrumbamiento de la esperanza de llegar a descubrir quién es la autoridad moral que puede dictar la respuesta a las grandes cuestiones morales, la excesiva centralización administrativa hace que la responsabilidad individual se supla por la evasiva institucional que justifica una institución con una ética débil administrativa.
La visión del hospital como entidad ética implica la actuación y el reconocimiento social como agentes morales conscientes, explícitos y sensibles. Tales convicciones éticas colectivas han de ser necesariamente compatibles con el respeto al legítimo pluralismo ético de los individuos. Esto lleva a que cada hospital defina su misión y su filosofía y que todos, médicos, pacientes, autoridades y administradores velen para que el hospital sea una institución éticamente comprometida, servidora de la vida y del hombre.
El Hospital ha de ser un foco de humanización, en el que la gente crezca en dignidad y se haga verdaderamente humana. Ha de ser hogar común, donde unos hombres y mujeres con serios compromisos éticos y científicos, compartidos y públicamente manifestados procuran ejercer su vocación profesional al servicio de los enfermos estos temas junto con los componentes del estilo ético del hospital están expuestos en este trabajo.